Como todas las cosas tienen un fin, este es el fin de mi blog.
Tras un curso durante el que he tenido que publicar los distintos trabajos que mi profesor de Sociales me ha mandado puedo decir que esta experiencia me ha enseñado y ayudado mucho, ya que todos hemos aprendido a saber buscar información y también hemos aprendido sobre todo lo que hemos publicado.
Espero que esta experiencia haya gustado a todos mis compañeros y tanto como a mí.
Notas sobre historia de Zafra y Extremadura. Ciencias Sociales. 2º ESO. IES Cristo del Rosario, Zafra.
jueves, 13 de junio de 2013
Cameranos en Zafra
Con
el discurrir de los años, la villa de Zafra va a ser casi
invadida por una tardía, pero nueva, repoblación, esta
vez castellana y aragonesa, la cual desde las riberas del Ebro, y en
especial desde las zonas logroñesas de Tierra
de Cameranos, llegará
a constituir una numerosa colonia de nuevos vecinos, que gustosamente
se aclimataran en Zafra.
Datos concretos y
frecuentes los tenemos de su presencia ya en esta villa en el siglo
XVII, y con una abrumadora cantidad, en el siglo XVIII, cuando en las
partidas y otros documentos parroquiales, aparecen haitando en Zafra
numerosos individuos y familias procedentes de aquellas tierras, en
especial de los lugares de Torrecilla de Cameros, Lumbreras, etc...
que comienzan a constituir una unida comunidad de poderosos
comerciantes y curtidores.
Familias
enteras con desdencia genealógica de de escudados linajes se
habían establecido en Zafra, con sus bienes y su dedicación
profesional, de tal manera que buena parte de los muchos mercaderes
que montaron sus negocios en torno a los soportales de las plazas
Grande y Chica, tenían esta procedencia. Los mercaderes
cameranos unidos entre sí y para evocar a su tierra, habían
adquirido una bella imagen de la Virgen, a semejanza de la llamada
Valvanera, que se venera en el territorio de Lumbreras, de donde eran
originarios. Los más destacados de esta colonia eran dos
caballeros llamados Domingo Martínez de Tejada y Mateo Martín
del Valle, y son dos de los que solicitan al Obispado de Badajoz en
el año 1729 la instalación de la capilla en la
Colegiata de la Candelaria para su celestial Patrona. Y eran ricos de
verdad, porque cuando se trata de levantar el retablo para dicha
imagen, afirman sin paliativos que van a hacer “que
van ha hacer un retablo costoso, por la mucha devoción y
posibilidades que para ello tienen”.
Numerosas familias
riojanas, en un número de unas cuarenta, vinieron a
establecerse en Zafra, y con sus actividades mercantiles,
configuraron de algún modo y dieron carácter mercantil
a la población zafrense, ya constituida con elementos
autóctonos moriscos y judíos, y con ellos ayudaron a
perfilar y a dar personalidad propia a esta hetereogénea
comunidad humana de Zafra.
Antonio de Nebrija en Zalamea de la Serena
Antonio Martínez
de Cala nace en la localidad sevillana de Lebrija en 1444 y es un
gramático.
Bibliografía:
-MARTÍN NIETO, D.A. “Antonio de Nebrija y sus hijos. Relaciones con Extremadura” Campanario-Villanueva de la Serena, 2007.
Cuantos escritores se han
acercado a Antonio de Nebrija repiten la conclusión de que el
gramático escribió la Gramática y el Vocabulario
en una casa que poseía en Zalamea de la Serena .
La vivienda de Antonio de
Nebrija se encontraba a las espaldas de la fortaleza, al levante,
lindando en 1530 con casas de Diego Pérez y el adarve o
postigo de la villa.
Volvió el maestro
Antonio de Nebrija a Alcalá de Henares, donde falleció
de apoplejía el dos de junio de 1522, a los 77 años de
edad.
En esta orla se
representa a Antonio de Nebrija impartiendo una clase de gramática.
El gramático
Nebrija ocupa la cátedra y mantiene en sus manos un libro
abierto; a sus lados se situan dos pajes soteniendo sendos volúmenes;
a la izquierda de la lámina, sentado ante un atril, aparece
don Juan de Zúñiga, vestido con el hábito de la
Orden de Alcántara, delante de él, un paje arrodillado
aguanta un libro entre sus manos; a su derecha, cuatro figuras,
identificándose la que está en primer plan o con frey
Marcelo de Nebrijo, hijo del gramático, por llevar en su pecho
la cruz de Alcántara. Se cree que la tres mujeres serían
las tres hermanas (Maria, Isabel y Elvira) de don Juan de Zúñiga.
-MARTÍN NIETO, D.A. “Antonio de Nebrija y sus hijos. Relaciones con Extremadura” Campanario-Villanueva de la Serena, 2007.
-http://antoniodenebrija.org/
-FERNÁNDEZ NIEVA,
J. “Zalamea de la Serena”. Gran Enciclopedia Extremeña.
Vitoria, 1992.
La portada del Hospital de Santiago
Visité
el Convento de Santiago una tarde de abril con una amiga mía.
Este convento se encuentra en una calle céntrica de la
localidad de Zafra, la cual se encuentra bajando por una de las
calles que desembocan en la plaza Chica. Al llegar allí nos
fijamos en su fachada.
La
artística fachada del Convento de Santiago es uno de los
detalles más destacables del edificio por su gran belleza.
Esta portada esta realizada en piedra de granito labrada. El es
estilo de esta fachada es un estilo gótico florido, aparte de
ello la portada esta toda ella encuadrada por dos pináculos
góticos. Este edificio se organiza estructuralmente en dos
parte, la superior y la inferior. En la parte inferior se sitúa
la puerta de entrada al convento . La puerta es de arco rebajado
dentro de un recuadro que la enmarca a modo de alfiz, muy decorado
con ornamentación de tallos en forma de lacería. En la
parte superior se alberga un vano ciego rehundido con arco conopial,
en cuyo fondo se encuentra una pintura al fresco, la cual representa
la escena de la Anunciación, tema muy caro a los artitas de la
época del Renacimiento. Esta pintura tiene relación con
la antigua advocación del hospital que era de la Satulación.
Portada del Hospital
Un antiguo convento desamortizado: el Convento de la Cruz
En aquel palacio
convertido en convento, la capilla quedó concluida en el año
1601, y a partir de ese momento y durante unos 235 años, este
edifico fue residencia de las monjas franciscanas de la Cruz.
La supresión y
desaparición del monasterio tuvo lugar debido a los efectos de
una orden desamortizadora que tuvo lugar en el año 1838,
acogiéndose las monjas franciscanas que en él vivían
junto a sus hermanas del convento de Santa Clara. Seis años
más tarde de la marcha de las monjas, en 1842, la Junta
Superior de ventas nacionales concedió gratuitamente el
edificio, para que se impusieran allí las escuelas públicas,
adaptando el edificio para esa nueva utilidad.
A la capilla se la hizo
desaparecer totalmente, y de ella sólo resta su portada que
daba a la plaza, en forma de arco conupial que resaltaba de la línea
de la fachada, y fue totalmente tapada con un revestimiento de cal,
cometiendo la torpeza de picar la piedra, para rebajar y esconder un
cordón franciscano, que adornaba la portada del templo.
Casualmente esta portada
fue descubierta durante las obras de restauración que
realizaba el ayutamiento en el año 1985, habiéndola
dejado libre, aunque ya algo deteriorada, como recuerdo del destino
monacal, que tuvo el actual ayutamiento de Zafra.
Dentro de los planes de
desamortización del edificio, parte del antiguo terreno de la
huerta del convento y de la calleja suprimida fue vendida a un
particular, y en ella construyó su vivienda particular Manuel
Martínez Rubiales, convirtiéndose en uno de los más
bellos edificios de este entorno.
Una tarde de mayo yo y mi
amiga Laura íbamos a ver este edificio, aunque ninguna de las
dos sabía donde se hallaba. Por ello, tras preguntar a varias
personas llegamos a un edificio que, según las indicaciones
que nos habían dado, debía ser el Convento de la Cruz.
Aunque a ella y a mí no nos cuadraba la descripción que
se daba al convento con el edificio al que nos habían mandado,
que en apariencia era moderno y parecía no corresponder con
las fechas de construcción del convento.
A los pocos días
nos dijeron que el antiguo convento se trataba del que actualmente es
el edificio del ayuntamiento.
Inscripción en la fachada
Puerta de entrada
Fachada del edificio
lunes, 11 de marzo de 2013
La virgen de Guadalupe
La Virgen de Guadalupe, patrona del Reino de Castilla, es una advocación
cuyo santuario, Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, está en el valle y
pueblo de Guadalupe (Cáceres), ente Villuercas y Altamiras.
El Monasterio, con sus siete siglos de historia (fue un 29 de octubre de 1389 cuando el Rey Juan I fundó el priorato jeronimiano de Guadalupe a donde envió a Fray Fernando Yánez con treinta monjes, que estuvieron hasta 1835, siendo ocupado posteriormente por los franciscanos en 1908), fue calificado en 1993 como Patrimonio de la Humanidad.
El lugar gira en torno a la imagen de la Virgen de Guadalupe hacia la que los habitantes peninsulares siempre mostrarón gran devoción, especialmente en los s. XIV y XV, teniendo su momento culminante cuando Cristobal Colón se postró ante los pies de la Virgen.
El Monasterio era un lugar donde solían detenerse los monarcas castellanos de paso a Portugal. De ahí su valor como archivo y biblioteca.
La leyenda de la reaparición de la talla de la Virgen de Guadalupe está ligada a los conflictos y enfrentamientos entre castellanos y levantinos con los musulmanes de Al-Andalus.
La talla se asignó inicialmente al grupo de Vírgenes negras de Europa occidental de los s. XI y XII. Desde el s. XIV aparece vestida con ricos mantos y joyas, dándole ese carácter triangular que la caracteriza.
En el lugar del hallazgo se construyó una ermita y posteriormente Alfonso XI elevó la pequeña iglesia a Santuario Nacional.
La Virgen de Guadalupe es la patrona de Extremadura y en 1928 recibió el título de Reina de las Españas o de la Hispanidad.
Pertenece al grupo de las Vírgenes con el Niño, mide 59 cm. de altura y pesa alrededor de 4 kg. Su manto es verde con vueltas en verde berbellón, presenta un cosbrecuello imitando un bordado en hilo, unos puños dorados y un manto de color ocre. Sobre la cabeza lleva un velo blanco con vueltas de color bermellón.
El rostro de la Virgen es ovalado aunque parece ser oblondo debido al rostrillo que lo circunda y que le oculta en parte las mejillas.La Virgen sostiene al niño ,algo recostado en su pecho ,con la mano izquierda( mano que no es visible ya que se oculta bajo los vestidos)portando un cedro ,con la derecha. Del cuerpo de la Virgen tan solo visibles su rostro y su mano derecha, muy delicadamente tallada . La mano extiende sus fines y delgados dedos hacia el frente sosteniendo entre ellos con gran finura el cetro.
El niño es del mismo estilo románico, presenta una mano derecha en plata tras haber pasado por un proceso de restauración. Sus medidas son 23 cm. de alto y pesa unos 200 gr. Toda la imagen presenta la poca expresividad característica del románico.El Niño pende de un anillo sujeto a los vestidos de su madre.Igualmente realizada en madera,de el,lo mismo que la Virgen,solo se aprecia su rostro (modelado en pesta) y su pequeña mano derecha que esta en actitud de bendicion.La mano del Niño sin embargo,esta efectuada en plata.
La menor habilidad y delicadeza que se observa en el Niño han hecho pensar que se debe a un artista diferente del que efectuó la talla de la Virgen.

Virgen de Guadalupe en la actualidad
El Monasterio, con sus siete siglos de historia (fue un 29 de octubre de 1389 cuando el Rey Juan I fundó el priorato jeronimiano de Guadalupe a donde envió a Fray Fernando Yánez con treinta monjes, que estuvieron hasta 1835, siendo ocupado posteriormente por los franciscanos en 1908), fue calificado en 1993 como Patrimonio de la Humanidad.
El lugar gira en torno a la imagen de la Virgen de Guadalupe hacia la que los habitantes peninsulares siempre mostrarón gran devoción, especialmente en los s. XIV y XV, teniendo su momento culminante cuando Cristobal Colón se postró ante los pies de la Virgen.
El Monasterio era un lugar donde solían detenerse los monarcas castellanos de paso a Portugal. De ahí su valor como archivo y biblioteca.
Talla de la Virgen románica
La leyenda de la reaparición de la talla de la Virgen de Guadalupe está ligada a los conflictos y enfrentamientos entre castellanos y levantinos con los musulmanes de Al-Andalus.
La talla se asignó inicialmente al grupo de Vírgenes negras de Europa occidental de los s. XI y XII. Desde el s. XIV aparece vestida con ricos mantos y joyas, dándole ese carácter triangular que la caracteriza.
En el lugar del hallazgo se construyó una ermita y posteriormente Alfonso XI elevó la pequeña iglesia a Santuario Nacional.
La Virgen de Guadalupe es la patrona de Extremadura y en 1928 recibió el título de Reina de las Españas o de la Hispanidad.
Pertenece al grupo de las Vírgenes con el Niño, mide 59 cm. de altura y pesa alrededor de 4 kg. Su manto es verde con vueltas en verde berbellón, presenta un cosbrecuello imitando un bordado en hilo, unos puños dorados y un manto de color ocre. Sobre la cabeza lleva un velo blanco con vueltas de color bermellón.
El rostro de la Virgen es ovalado aunque parece ser oblondo debido al rostrillo que lo circunda y que le oculta en parte las mejillas.La Virgen sostiene al niño ,algo recostado en su pecho ,con la mano izquierda( mano que no es visible ya que se oculta bajo los vestidos)portando un cedro ,con la derecha. Del cuerpo de la Virgen tan solo visibles su rostro y su mano derecha, muy delicadamente tallada . La mano extiende sus fines y delgados dedos hacia el frente sosteniendo entre ellos con gran finura el cetro.
El niño es del mismo estilo románico, presenta una mano derecha en plata tras haber pasado por un proceso de restauración. Sus medidas son 23 cm. de alto y pesa unos 200 gr. Toda la imagen presenta la poca expresividad característica del románico.El Niño pende de un anillo sujeto a los vestidos de su madre.Igualmente realizada en madera,de el,lo mismo que la Virgen,solo se aprecia su rostro (modelado en pesta) y su pequeña mano derecha que esta en actitud de bendicion.La mano del Niño sin embargo,esta efectuada en plata.
La menor habilidad y delicadeza que se observa en el Niño han hecho pensar que se debe a un artista diferente del que efectuó la talla de la Virgen.

Virgen de Guadalupe en la actualidad
domingo, 10 de marzo de 2013
Una inscripción
Una inscripción es un escrito grabado en metal, piedra u otro material resistente que se crea para conservar en la memoria un hecho importante.
Esta inscripción se encuentra en la actual Escuela Municipal de Música de Zafra, aunque antiguamente daba lugar a los Juzgados de Zafra, y es a eso a lo que hace referencia esta inscripción en la que se nos muestra la fecha en la que fue inaugurado este edificio.
Esta inscripción se encuentra en la actual Escuela Municipal de Música de Zafra, aunque antiguamente daba lugar a los Juzgados de Zafra, y es a eso a lo que hace referencia esta inscripción en la que se nos muestra la fecha en la que fue inaugurado este edificio.
Una bujarda
Las bujardas, o chozos, son construcciones que realizaban los pastores en los campos.
En Extremadura son comunes, y existen cuatro tipos.
Una tarde de marzo fui a ver una bujarda que se encontraba en un campo a medio camino entre Zafra y La Lapa. Fui con mi padre en coche, puesto que se esa tarde había sido muy lluviosa y hacía bastante viento. Para llegar hasta ella, tuve que atravesar un campo, el cual, debido a la lluvia, el suelo estaba muy húmedo y era muy difícil de andar.
Tras observarla pude ver que era una bujarda del tipo 3, dado que estaba construido en piedra.
Este tipo de bujardas es el más común en Extremadura.
Estas bujardas han sido utilizadas como viviendas permanentes o temporales para los pastores. También se han usado como almacenes de productos agricolas o como lugar donde guardar los animales, aunque actualmente ya no tienen ningún uso, y por ello, muchas de ellas están derruidas y abandonadas.
Esta bujarda aún conserva su falsa cúpula, la cual esta cubierta de musgo. Es bastante grande.
Cuando me fijé en las paredes de esta bujarda pude ver que estaban echas de piedra y que las paredes estaban enlucidas.
Al entrar en el interior pude comprobar que no tenía ningún banco adosado, los cuales eran usados por los pastores para sentarse y descansar.
También vi que tenía 3 pequeñas ventanas y un orificio arriba que probablemente sería usado como chimenea para dejar ir el humo de las fogatas que se hacían en su interior.
En Extremadura son comunes, y existen cuatro tipos.
Una tarde de marzo fui a ver una bujarda que se encontraba en un campo a medio camino entre Zafra y La Lapa. Fui con mi padre en coche, puesto que se esa tarde había sido muy lluviosa y hacía bastante viento. Para llegar hasta ella, tuve que atravesar un campo, el cual, debido a la lluvia, el suelo estaba muy húmedo y era muy difícil de andar.
Tras observarla pude ver que era una bujarda del tipo 3, dado que estaba construido en piedra.
Este tipo de bujardas es el más común en Extremadura.
Estas bujardas han sido utilizadas como viviendas permanentes o temporales para los pastores. También se han usado como almacenes de productos agricolas o como lugar donde guardar los animales, aunque actualmente ya no tienen ningún uso, y por ello, muchas de ellas están derruidas y abandonadas.
Esta bujarda aún conserva su falsa cúpula, la cual esta cubierta de musgo. Es bastante grande.
Cuando me fijé en las paredes de esta bujarda pude ver que estaban echas de piedra y que las paredes estaban enlucidas.
Al entrar en el interior pude comprobar que no tenía ningún banco adosado, los cuales eran usados por los pastores para sentarse y descansar.
También vi que tenía 3 pequeñas ventanas y un orificio arriba que probablemente sería usado como chimenea para dejar ir el humo de las fogatas que se hacían en su interior.
Pequeña ventana en el interior de la bujarda
La chimenea de la bujarda
Exterior de la bujarda
El pilar del Duque
El pilar del Duque es el pilar más antiguo de Zafra. Probablemente data del siglo XIV. Recibe este nombre por encontrarse (en su anterior emplazamiento) a escasos metros del muro trasero del alcázar de los Duques de Feria, cuyos antecesores promovieron su construcción, para el servicio de los vecinos de esta villa.
La pieza más destacable de este monumento es su morrión, o pilar, en forma de capitel piramidal, decorado con motivos florenzados. En el frente por donde se situan los caños de donde brota el agua y bajo un arco conupial rebajado en la misma piedra, aparecen apenas reconocibles los escudos de los Señores de Feria, ya que según el cronista inglés Richard Ford, fueron picadas y demolidas por los franceses en la Guerra de la Independencia.
En el centro de ambos escudos se puede contemplar el jarrón de azucenas, que constituía el primitivo símbolo heráldico de la villa.
Este pilar recibe sus aguas desde un manantial llamado "la madre del agua" y que estaba a cuatrocientos pasos de la población.
Fui a este pilar una tarde de enero con mi amiga Rocio y las dos pudimos observar el mal estado en el que se encuentra este pilar, dado que existen pequeños agujeros por los que se escapa parte del agua del pilar.
Por un lado esta pintado con varios grafitis.
La pieza más destacable de este monumento es su morrión, o pilar, en forma de capitel piramidal, decorado con motivos florenzados. En el frente por donde se situan los caños de donde brota el agua y bajo un arco conupial rebajado en la misma piedra, aparecen apenas reconocibles los escudos de los Señores de Feria, ya que según el cronista inglés Richard Ford, fueron picadas y demolidas por los franceses en la Guerra de la Independencia.
En el centro de ambos escudos se puede contemplar el jarrón de azucenas, que constituía el primitivo símbolo heráldico de la villa.
Este pilar recibe sus aguas desde un manantial llamado "la madre del agua" y que estaba a cuatrocientos pasos de la población.
Fui a este pilar una tarde de enero con mi amiga Rocio y las dos pudimos observar el mal estado en el que se encuentra este pilar, dado que existen pequeños agujeros por los que se escapa parte del agua del pilar.
Por un lado esta pintado con varios grafitis.
Vista lateral del Pilar
Pilar del Duque visto de frente
En esta foto se puede observar el mal estado los escudos
Vista frontal del pilar
La callejita del Clavel
La callejita del Clavel es una calle muy corta, de unos 30 metros, que se encuentra al lado del Arco de Jerez, situado en Zafra, y no es otra que una porción del antiguo camino de ronda, que recorría todo el interior de la muralla.
En esta calle vivía una mujer muy conocida y apreciada en Zafra. Se trataba de Ana Pérez de Bilasio, que popularmente era conocida como "Ana la Nalga".
Esta calle es una calle sin salida, turbia en su fondo pero clara y luminosa, porque en los balcones de las casas de la calle no faltaban nunca hojas verdes de geranios y el aroma de los claveles.
Las casas de esta calle son de un color blanco que contrasta con los alegres colores de las flores que adornan cada uno de los balcones de las casas de esta calle.
En esta calle vivía una mujer muy conocida y apreciada en Zafra. Se trataba de Ana Pérez de Bilasio, que popularmente era conocida como "Ana la Nalga".
Esta calle es una calle sin salida, turbia en su fondo pero clara y luminosa, porque en los balcones de las casas de la calle no faltaban nunca hojas verdes de geranios y el aroma de los claveles.
Las casas de esta calle son de un color blanco que contrasta con los alegres colores de las flores que adornan cada uno de los balcones de las casas de esta calle.
Callejita del Clavel vista desde la calle desde la Calle Jerez.
jueves, 14 de febrero de 2013
La alcazaba de Montemolín
La alcazaba de Montemolín se encuentra en una colina de la falda norte de Sierra Morena, al este del río Viar. Se levanta en un cerro, al oeste de la población, no lejos de la misma, en un lugar de paso entre Extremadura y Andalucía.
Las primeras noticias que existen del castillo se remontan al 1.242. La primera descripción del castillo data de 1.495, y la última de 1.550. En este corto espacio de tiempo, la vida arquitectónica del castillo pasa por dos momentos importantes: el primero son las obras que se inician en el 1.508, que cambian su estructura interna, y el segundo, que es la entrada en su fase de deterioro, ya que en el 1.550 ya estaba abandonada.
Esta fortaleza estaba situada en un punto estratégico, importantes en cuanto al control de la vía de comunicaciones entre Córdoba, Sevilla y Mérida.
Fortaleza notable por su solidez y sus grandes dimensiones.
La fábrica es de tapial con torres en la parte árabe que es casi toda y con adiciones de la época de la reconquista. Su planta irregular por lo quebrado del terreno es alargada aunque menor y a más baja altura que la de Reina, a la que se le parece mucho.
El conjunto defensivo presenta numerosas características de la época almohade, como el material usado en sus muros, la disposición de las torres y las dimensiones del encofrado. No se descrta la posibilidad de que con anterioridad existiese en el lugar algún tipo de fortificación.
Es un recinto más o menos rectangular, cuyos frentes largos son el norte y el sur, de unos 130 metros por 50 de ancho.
Lo único que quedan restos en el recinto principal, el cual tenía siete cubos macizos, dos cubiertos y otros cinco exentos, y otras dos torres, la del Homenaje y la de MIramontes, llamada por el paisaje que desde allí se divisaba.
Hasta 1.508 nada mas pasar la puerta principal estaba la casa del portero y, en un corral grande, se situaban una tahona, una caballeriza y un pajar; luego estaban las depedencias y por detrás de las mismas había corrales, en uno de los cuales estaba el aljibe más antiguo, de los tres que tenía, llamado de los arcos, cuyos restos se pueden apreciar en la actualidad
Las primeras noticias que existen del castillo se remontan al 1.242. La primera descripción del castillo data de 1.495, y la última de 1.550. En este corto espacio de tiempo, la vida arquitectónica del castillo pasa por dos momentos importantes: el primero son las obras que se inician en el 1.508, que cambian su estructura interna, y el segundo, que es la entrada en su fase de deterioro, ya que en el 1.550 ya estaba abandonada.
Esta fortaleza estaba situada en un punto estratégico, importantes en cuanto al control de la vía de comunicaciones entre Córdoba, Sevilla y Mérida.
Fortaleza notable por su solidez y sus grandes dimensiones.
La fábrica es de tapial con torres en la parte árabe que es casi toda y con adiciones de la época de la reconquista. Su planta irregular por lo quebrado del terreno es alargada aunque menor y a más baja altura que la de Reina, a la que se le parece mucho.
El conjunto defensivo presenta numerosas características de la época almohade, como el material usado en sus muros, la disposición de las torres y las dimensiones del encofrado. No se descrta la posibilidad de que con anterioridad existiese en el lugar algún tipo de fortificación.
Es un recinto más o menos rectangular, cuyos frentes largos son el norte y el sur, de unos 130 metros por 50 de ancho.
Lo único que quedan restos en el recinto principal, el cual tenía siete cubos macizos, dos cubiertos y otros cinco exentos, y otras dos torres, la del Homenaje y la de MIramontes, llamada por el paisaje que desde allí se divisaba.
Hasta 1.508 nada mas pasar la puerta principal estaba la casa del portero y, en un corral grande, se situaban una tahona, una caballeriza y un pajar; luego estaban las depedencias y por detrás de las mismas había corrales, en uno de los cuales estaba el aljibe más antiguo, de los tres que tenía, llamado de los arcos, cuyos restos se pueden apreciar en la actualidad
Vista del alcázar desde el pueblo
Vista del castillo desde la Torre del Homenaje
Vista del castillo y el pueblo desde la torre del Homenaje
Torre del Homenaje
En una parte de la muralla
Junto a la torre del Homenaje
Junto a la torre del Homenaje
Vista del pueblo desde el castillo
En el recinto interior del castillo
En la entrada del castillo
Muralla del castillo vista desde el exterior
miércoles, 13 de febrero de 2013
La casa del Marqués de Solanda
Frente al alcázar y bajando su cuesta se halla la casa del Marqués de Solanda, un edificio, que ya, en su extensa fachada, pregona la categoría de su interior. Artísticos relieves en balcones y cornisas, capiteles de bella factura corintia, meritorios herrajes y una bien organizada serie de huecos, hacen de esta casa uno de los edificios más interesantes entre las construcciones zafrenses de este siglo. El arco de San Antonio le ha prestado su anchura para hacer más prolongada su fachada. En su interior, se puede observar que el estilo artístico es distinto al exterior, este estilo es neomudéjar. Porque pasar el vestíbulo y recorrer su patio es adentrarse en un mundo de inspiración árabe. El constructor y dueño de esta obra es Francisco Fernández y Fernández. Toda la obra, maravillosa yesería calcada con exactitud de sus modelos, es prodigio de buen hacer e imitar. Inscripciones en árabe, gráciles columnas, figuras geométricas y lacería han sido realizadas, con una fidelidad tal que llegue a confundir al menos experto. El Marqués de Solanda, dirigió e inspiró la obra en 1905, estando hoy considerada como de las más artíticas realizaciones en arquitectura privada de Zafra.
Bibliografía:
CROCHE DE ACUÑA, F. Para andar por Zafra. Zafra, 2003.
TORO FERNÁNDEZ, B. Urbanismo y Arquitecturas Aristocráticas y de Renovación Burguesa en Zafra. Zafra, 1994.
La torre de San Francisco
La torre de San Francisco, único resto actual del antiguo convento, tiene un primer cuerpo en piedra, donde se abre la puerta del antiguo templo, bajo un arco de medio punto. En la fachada
occidental hay una ventana con frontón y adornos platerescos en que se muestra el escudo franciscano con los brazos cruzados entre Cristo y Francisco de Asís.
Hasta el cuerpo de las campanas, sigue la edificación con buenas piedras en sus ángulos, y una ancha cornisa que la circunda. Después, ya en el cuerpo de campanas, la obra es de ladrillo de estilo clásico, con dos ventanales por cada lado. Una media naranja o cúpula, con una linterna superior y otras cuatros en los ángulos, remata la torre.
El estado de la torre es muy malo, está semiderruido por varios lados, y no quedan restos del antiguo convento.
Fui a visitar esta torre una tarde de enero con una amiga mía. Yo esperaba encontrarmela en peor estado con grafitis en las paredes y restos de basura dentro de la torre, pero para mi sorpresa la torre estaba limpia, a excepción de unos excrementos de palomas y otras aves.
Hasta el cuerpo de las campanas, sigue la edificación con buenas piedras en sus ángulos, y una ancha cornisa que la circunda. Después, ya en el cuerpo de campanas, la obra es de ladrillo de estilo clásico, con dos ventanales por cada lado. Una media naranja o cúpula, con una linterna superior y otras cuatros en los ángulos, remata la torre.
El estado de la torre es muy malo, está semiderruido por varios lados, y no quedan restos del antiguo convento.
Fui a visitar esta torre una tarde de enero con una amiga mía. Yo esperaba encontrarmela en peor estado con grafitis en las paredes y restos de basura dentro de la torre, pero para mi sorpresa la torre estaba limpia, a excepción de unos excrementos de palomas y otras aves.
Interior de la torre
Vista de la torre desde lejos
Fachada de la torre
Lateral de la torre en la que se puede observar su mal estado
La torre de Espantaperros
La torre de Espantaperros constituye un modelo bien definido en la arquitectura almohade. Se encuentra entre el tipo más complejo de la Torre del Oro de Sevilla y la más sencilla de la Torre Redonda de la era de Cáceres. Esta de Badajoz es un modelo intermedio constituido por una base octogonal y es albarrana, en algunas partes de la coracha la distancia es muy pronunciada, hasta a llegar a los 25 metros. Como todas estas torres es maciza hasta la altura del adarve con el que esta comunicado, disminuendo sobre ese nivel dos pisos más la terraza almenada. El cuerpo primástico de sección cuadrada que remata actualmente la torre hoy es originario de la época almohade, se trata de un templo pequeño a modo de campanario dispuesto en el siglo XVI con la intervención de maestros mudéjares. En el verano de 1920
el estado de ruina era preocupante. Un par de años después parte de la torre se
desplomó cayendo al interior de una de las viviendas que tenía adosadas. El
alcalde, a instancias del arquitecto municipal, exigió a la Comisión de
Monumentos que se pronunciara: se restauraba la torre o se demolía
miércoles, 30 de enero de 2013
La fachada de la casa del Ajimez
La casa del Ajimez
La casa del Ajimez se encuentra en el número 6 de la calle Boticas, en Zafra y es una palpable prueba del pasado morisco de Zafra y proclama a la actual generación el testimonio de una cultura con la que esta ciudad se identificó plenamente.
El interior de esta casa que ha sido restaurado recientemente se ha rehabilitado y reconvertido en un centro turístico para conocer la historia y el arte de Zafra, así como su pasado religioso, económico y gremial. Aún conserva en sus dependencias ese sabor mudéjar de su origen.
La fachada de la casa del Ajimez
La fachada está cubierta de motivos geométricos esgrafiados, encalados posteriormente en la mayor parte de la pared. La técnica del esgrafiado consistía en dibujar sobre el revoque de los muros estando aún fresco, raspando la cal, con lo que se conseguía una decoración barata, que algunas veces llegaba a colorearse. Sobre esta fachada esgrafiada se conserva, como principal adorno y punto de atención artístico, un precioso ajimez morisco, que podría datar aproximadamente del siglo XIV, como único ejemplar de su clase de todo un pasado histórico, y que serían frecuentes en otros lugares y edificios de la parte vieja de la población, que está cercana a este centro junto a la Plaza Chica. Esta venta geminada está partida en su centro por una columnita de piedra, con un arco polilubolado en artístico ladrillo trabajado, ya que tiene arabescos y volutas caprichosas en los extremos de dichos lóbulos.Unos brillantes azulejos forman el marco y antepecho de la ventana, sirviendo igualmente de fondo, en los vanos que dejan los ladrillos, a ambos lados de los arcos.
La casa del Ajimez se encuentra en el número 6 de la calle Boticas, en Zafra y es una palpable prueba del pasado morisco de Zafra y proclama a la actual generación el testimonio de una cultura con la que esta ciudad se identificó plenamente.
El interior de esta casa que ha sido restaurado recientemente se ha rehabilitado y reconvertido en un centro turístico para conocer la historia y el arte de Zafra, así como su pasado religioso, económico y gremial. Aún conserva en sus dependencias ese sabor mudéjar de su origen.
La fachada de la casa del Ajimez
La fachada está cubierta de motivos geométricos esgrafiados, encalados posteriormente en la mayor parte de la pared. La técnica del esgrafiado consistía en dibujar sobre el revoque de los muros estando aún fresco, raspando la cal, con lo que se conseguía una decoración barata, que algunas veces llegaba a colorearse. Sobre esta fachada esgrafiada se conserva, como principal adorno y punto de atención artístico, un precioso ajimez morisco, que podría datar aproximadamente del siglo XIV, como único ejemplar de su clase de todo un pasado histórico, y que serían frecuentes en otros lugares y edificios de la parte vieja de la población, que está cercana a este centro junto a la Plaza Chica. Esta venta geminada está partida en su centro por una columnita de piedra, con un arco polilubolado en artístico ladrillo trabajado, ya que tiene arabescos y volutas caprichosas en los extremos de dichos lóbulos.Unos brillantes azulejos forman el marco y antepecho de la ventana, sirviendo igualmente de fondo, en los vanos que dejan los ladrillos, a ambos lados de los arcos.
Casa del Ajimez vista desde la entrada de la calle Boticas
Ajimez
Motivos geométricos sobre la pared de la casa
Puerta principal y ventana de la casa
En la puerta principal
Junto a la casa
Bibliografía:
CROCHE DE ACUÑA, F. Para andar por Zafra. Zafra, 2003.
CROCHE DE ACUÑA, F. Zafra. Una lección de historia y arte. Zafra, 2006.
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